Descubre SATE, sistema de aislamiento térmico exterior
El sistema SATE es un aislamiento de fachada para muros y losas ventiladas que funciona superponiendo 5 capas: capa de fijación, capa aislante, capa impermeabilizante -abierta a la difusión del vapor y resistente a impactos- y capa externa de revestimiento.
¿Cómo funcionan y se instalan estos componentes? ¿Es un sistema para obra nueva o se puede incorporar a edificios existentes? ¿Cómo diseñar correctamente un SATE para mi proyecto arquitectónico? Encuentre estas y otras respuestas a continuación.
Componentes de un SATE
Fijación para Material Aislante
Generalmente está compuesto por mortero adhesivo. En algunos casos se añaden fijaciones mecánicas, especialmente si la estructura tiene fuertes aspiraciones de viento o si se ha elegido un revestimiento muy pesado.
Material aislante
Depende de la elección del cliente y de las necesidades específicas del proyecto. Existen en el mercado una gran cantidad de materiales aislantes, pero los más utilizados son el EPS, XPS, Lana de Roca, Materiales Aislantes derivados de la Madera, Espumas Rígidas de Silicato, Espumas Fenólicas, entre otros.
Capa Base de Mortero con Polímeros + Malla de Refuerzo
La capa base, según lo determina la Unión Europea, funciona como una capa repelente al agua y es permeable al vapor, mientras que la malla de refuerzo permite que el sistema resista adecuadamente impactos, condiciones climáticas y otros estímulos externos.
Revestimiento
Es la capa final y visible al exterior. Se puede elegir entre una amplia gama de revestimientos, pinturas y otros acabados.
¿Sobre qué superficies se pueden aplicar?
Estos sistemas surgieron originalmente para mejorar las edificaciones existentes, ya que se pueden aplicar sobre cualquier tipo de superficie: muros de mampostería, hormigón (revestido o no), sistemas prefabricados, tabiques ligeros de madera o metal, OSB, fibrocemento, tableros de fibra para exteriores, etc. entre otros. Es un sistema ligero que no añade más peso a la superficie al estar compuesto principalmente por aire.
Es importante señalar que en los mercados desarrollados este tipo de sistemas se han regulado para que un solo fabricante proporcione la solución completa. De esta forma, la responsabilidad de su correcto desempeño recaerá en un único proveedor.
Consideraciones de diseño
- Empiece por preguntar: ¿Cuánto quiero aislar?
Antes de diseñar un sistema SATE , debemos responder las siguientes preguntas: ¿Se realizó un análisis energético del proyecto? ¿Existe un valor U (transmitancia térmica) que deba alcanzarse? ¿Es un proyecto desarrollado bajo el programa de contaminación del aire, con valores U más estrictos? Si nuestro sistema SATE está diseñado para alcanzar el valor U requerido por el proyecto, podemos estar seguros de su comportamiento térmico en el futuro.
- Determine qué tan amplio es el sistema en función de sus condiciones específicas.
El ancho del sistema es variable y puede variar desde 2,5 cm hasta 20 cm, siendo el ancho más común de 8 cm. Primero hay que definir la envolvente. No es lo mismo diseñar un SATE bajo un alero en un 3er piso que uno que esté a nivel de calle o totalmente expuesto a las condiciones climáticas (lluvia, granizo, sol directo, viento, otros).
- Elegir el material aislante de acuerdo a las zonas del proyecto
Al igual que en el punto anterior, no es lo mismo diseñar un SATE para un muro normal o losa ventilada que para una zona de riesgo de impacto o presencia de agua, por ejemplo. Diferentes soluciones aislantes pueden mezclarse en un mismo proyecto, dependiendo de la zona donde se encuentre el sistema, y los valores U también serán distintos si el SATE es aplicado en un muro o en una fachada ventilada.
- Definir la unión entre el SATE y los sistemas de aislación de la cubierta, el zócalo, ventanas y otros
Al no ser un sistema para cubiertas o submuraciones, SATE nos obliga a determinar la forma en que nuestra aislación de muros se conectará con la aislación de los techos. En cuanto al zócalo, también debemos definir hasta donde llegará la aislación, y cómo ésta se conectará con la aislación de los pisos.
- Resolver el encuentro entre el SATE y los elementos que «interrumpan» el sistema
Además de la cubierta y el zócalo, se deben identificar y resolver todos aquellos elementos que podrían «interrumpir» el sistema: puertas, ventanas, luminarias, y otros. En edificios existentes, se deben considerar todas estas pre-existencias, y al mismo tiempo se debe estudiar el sustrato sobre el cual se aplicará el sistema.
- Buscar asesoría y analizar las características técnicas del SATE ofrecido
SATE no es una pintura; Es una solución que tiene cierto volumen y por tanto requiere de asesoramiento profesional para asegurar su correcto funcionamiento. En este sentido, es importante entender las características técnicas del producto y requerir una ficha que explique de forma sencilla y detallada todo lo que necesitamos saber antes de aplicarlo a nuestro proyecto.